El recorrido del Descenso del Sella en canoa

Apenas recorridos 50 metros desde nuestra salida nos encontramos con el primer rabión, o dicho de otra forma, una zona del río donde la corriente se hace más impetuosa, pero con dificultad mínima, aún así, las canoas cogen algo de velocidad. Tras una curva hacia la derecha las aguas remansan y podremos aprovechar la oportunidad para hacer fotografías disfrutando con calma del paisaje que nos rodea.

Ya hemos recorrido el primer kilómetro de nuestro descenso y nos encontramos un nuevo rabión, el de La Remolina, hará que la emoción aumente como lo hace la velocidad de nuestra canoa. Las aguas forman dos corrientes en forma de V, en medio de ambas será donde nos colocaremos para salvar esta dificultad. Como en el caso del anteriomente comentado de la Raíz, el final en curva nos llevará a un nuevo remanso A nuestra derecha dejamos atrás una plataforma utilizada por los pescadores por su posición ideal para esa práctica.

Seguimos descendiendo por el cauce del río, y el siguiente lugar a destacar, aproximadamente a 1,200 kilómetros desde el inicioe es el coto de Pesca de El Ricao (coto salmonero). En este lugar el cauce del río se estrecha empujado por una pared rocosa que dejamos a nuestra derecha y originando profundos pozos. Este es el primer coto de pesca de varios que nos encontraremos en el recorrido. En la imagen de la derecha, vemos como el río serpentea en esta zona del recorrido.

Aproximadamente en el kilómetro número 3 de nuestro recorrido y aún en el concejo de Cangas de Onís, pasamos bajo la pasarela de Fuentes que pertenece a la pequeña parroquia de Triongo, en el coto salmonero de Los Llaos.

En este tramo de dificultad media disfrutaremos de un trayecto en el que la velocidad aumentará debido a los rápidos y tendremos que estar atentos a las piedras que se cruzarán en nuestro camino. Seguiremos por la margen izquierda del río, evitando la derecha donde permanecen los restos del derruido espigón de Triongo.

Entre los kilómetros 4 y 5 de recorrido, pasaremos bajo la pasarela de Fuentes, utilizada por pescadores y turistas para cruzar el Sella.

Aproximadamente en el kilómetro 5 del descenso nos encontramos con una zona de las zonas que más gusta a los aficionados a bajar el Sella en canoa. Se trata de una zona de aguas mansas y profundas, que es además una de las más concurridas por las canoas del río, un lugar de encuentro de todos los aventureros selleros. El pozo del Arco y la playa fluvial que se forma añaden atractivo a este enclave.

En la localidad de Margolles, en el límite entre los concejos de Cangas de Onís y Ribadesella, de nuevo encontramos un rabión que discurre por la margen derecha del río y que lleva el nombre del pico cercano, el Picu la Vieya.

En el km. 7 del descenso y ya en el concejo de Ribadesella de nuevo la tranquilidad de adueña de las aguas en un nuevo remanso. Desde una escalera en la margen derecha podemos presenciar cómo los bañistas más audaces se lanzan a las frías aguas del Sella. En el final de este tramo se localiza nuestra primera parada opcional, un lugar donde podemos encontrar chiringuitos y una zona de recreo para parar a comer o tomar algo tranquilamente viendo pasar canoas por el río.

Sin duda uno de los tramos más espectaculares de todo nuestro recorrido y en el que debemos estar atentos para evitar las muchas rocas que jalonan el río. Aquí la dificultad que nos encontraremos será encontrar un lugar por donde pasar con nuestra piragüa.

Aquí nos encontramos con el tramo recto más largo de todo el recorrido, además del pozo de mayor profundidad.

Es también uno de los rincones más conocidos del Sella y parada obligada el día del Descenso Internacional del tren turístico que permite a los viajeros, desde una pared natural en la vertiente derecha, observar a los palistas en pleno esfuerzo. Las vistas aquí son espectaculares.

En este tramo, justo a 10.000 metros del inicio de la bajada del río Sella, se encuentra un lugar en el que se puede parar a comer, tomar algo o refrescarse.

Atravesamos un hermoso rincón del concejo de Ribadesella, Cuevas. La pasarela que dejamos a nuestro paso es utilizada para vadear el río tanto por los habitantes de la zona como por los muchos aficionados a la pesca que acuden al Sella.

Un nuevo estrechamiento del cauce y la gran cantidad de rocas que salen a nuestro paso hace que aumente un poco la dificultad, pero nada que no podamos vencer si nos colocamos en el centro del río y seguimos el único canal de paso. De esta forma nos encaminaremos hacia la última etapa de nuestro apasionante recorrido.

La pequeña localidad de Llovio, a escasos kilómetros de la capital del concejo, es un importante nudo de comunicaciones. La estación de ferrocarril perteneció a la línea de Ferrocarriles Económicos que desde Oviedo llegó hasta Llanes en 1905. Cercano a la estación se conserva un puente metálico, en el mismo punto en el que en uno de nuestros embarcaderos privados os esperan para trasladaros hasta el centro logístico donde dispondréis de unas modernas instalaciones en las que podréis daros una ducha y cambiaros de ropa.